CADDI, el inyector de dióxido de carbono para el diagnóstico
Una manera nueva y más segura de hacer angiografías
Ficha técnica
Tipo de innovación: Aparato
Ámbito: Análisis clínicos
Líder de innovación: Liderazgo compartido
Año: 1999
Etapa: 1972-2002
Difusión: Internacional
Impacto económico: Bajo
Nivel de innovación: Evolutivo
Patente: Sí
Relaciones interdisciplinares: Hospital
La angiografía convencional
En radiología vascular, las imágenes de rayos X para el diagnóstico se obtienen normalmente inyectando al paciente un medio de contraste yodado que perfila los vasos sanguíneos objeto de estudio.
Angiografías por inyección de CO2
Grifols inventó un nuevo aparato para realizar angiografías utilizando dióxido de carbono (CO2) como medio de contraste radiológico. El CO2 es una alternativa ideal a los medios de contraste habituales por su mayor seguridad, ya que evita posibles complicaciones, como las reacciones alérgicas a los medios de contraste yodados o los problemas renales.
El denominado "Carbon Dioxide Diagnostic Injector", o CADDI, fue el aparato específico diseñado por Grifols para inyectar CO2 en el sistema vascular de manera automatizada y controlada.
“Muchos de los inventos de Diagnostic Grifols se han inspirado en las ideas de especialistas que trabajan a diario en un campo. Esta experiencia directa de la práctica médica y hospitalaria ha representado una fuente de información crucial sobre las necesidades del sector.”
El Dr. Montañá, inspirador del CADDI
Muchos de los inventos de Diagnostic Grifols se han inspirado en las ideas de especialistas que trabajan a diario en un campo. Su experiencia directa de la práctica médica y hospitalaria ha representado una fuente de información crucial sobre las necesidades del sector. Este fue el caso del CADDI, un proyecto desarrollado por el departamento de I+D de Diagnostic Grifols con el asesoramiento médico del Dr. Montañá, responsable del departamento de Radiología Vascular e Intervencionista del Hospital Clínico de Barcelona.
El Dr. Montañá llevaba tiempo sopesando la idea de automatizar la técnica de diagnóstico manual con la intención de reducir los riesgos para los pacientes que se sometían a una angiografía. Solo hacía falta que alguien llevara a la práctica su idea. Así, consideró varias posibilidades antes de que la Unidad de Productos Médicos de Diagnostic Grifols respondiera a su sugerencia. La naturaleza del proyecto y la tecnología requerida para desarrollarlo encajaban perfectamente con el perfil de la empresa. El Dr. Montañá, que se mostró muy satisfecho con la colaboración, comentaba al respecto: "El esfuerzo lo ha hecho Grifols. Yo exponía los problemas e I+D los solucionaba, y creo que estas soluciones han sido buenas". El producto final, el CADDI, le gustó por su funcionalidad y su diseño, como atestiguan sus palabras: "Considero que está muy conseguido, y corroboran mi apreciación los comentarios de los colegas de otros hospitales".
¿Por qué no tuvo éxito el CADDI?
Este aparato de alta precisión se diseñó para que su uso fuera sencillo. La disposición y movilidad de sus componentes, la facilidad de programación y transporte, y los sistemas de seguridad lo hacían idóneo para el espacio de trabajo de los radiólogos vasculares. Todas estas características deberían haberle permitido competir sin problemas con los productos de grupos internacionales consolidados en esta especialidad médica. Sin embargo, a pesar de su distribución internacional, no consiguió triunfar. Para entender el destino del CADDI, se ha de tener en cuenta que, como las grandes multinacionales que comercializaban sistemas de radiología vendían también medios de contraste radiológico a precios elevados para sacarle el máximo partido a sus sistemas, y el CO2 licuado como medio de contraste era muy barato comparado con los medios de contraste radiológico habituales, no había interés en promocionarlo, por lo que se ejerció presión para que la técnica no arraigara. A consecuencia de las escasas ventas, Diagnostic Grifols tuvo que discontinuar la producción y comercialización del CADDI a mediados de la primera década del siglo XXI.
Bibliografía
Grupo Grifols. (1999). Inyector CADDI. Revista Cosmos: periódico para los colaboradores del Grupo Grifols, 12(2), ca. 10.
Grupo Grifols. (2001). Caddi, el inyector de CO2 ya se utiliza en varios hospitales. Revista Cosmos: periódico para los colaboradores del Grupo Grifols, 22(4), 4.